Óptico-optometrista

Óptico-optometrista

La presbicia o vista cansada ocurre a todas las personas alrededor de los 40 años, se debe a una perdida de la flexibilidad de acomodación del cristalino y dificulta la visión cercana. Las lentes progresivas se usan fundamentalmente para compensar la presbicia o vista cansada. Si el usuario tiene también miopía o hipermetropía y/o astigmatismo, los compensan también. Son lentes que permiten ver bien a corta, media y larga distancia.

Hay muchas variantes a tener en cuenta en la adaptación de las lentes progresivas: La calidad de las lentes, el tipo de progresión, la graduación del usuario, la elección de la montura, el montaje…

Para  encuadrar mejor lo que es una lente progresiva, hablaremos en primer lugar de los tipos de lentes, en base a su focalización:

1-    Monofocales: son las más usadas; las utilizan las personas que tienen la misma graduación a todas las distancias y también las que teniendo diferente graduación, quieren mirar solo a una distancia determinada.  Por ejemplo, hay muchas personas présbitas, usuarios de lentes progresivas que para conducir  o para leer en la cama, utilizan monofocales.

2-    Bifocales: se emplean para enfocar a dos distancias, cerca y lejos.

3-    Multifocales o Progresivas: son las más recomendadas en los casos  que deban utilizar una graduación de cerca diferente de la de lejos, porque además dan la posibilidad de enfocar las distancias intermedias.

También  hay que tener en cuenta que, en el mundo de la visión,  se considera:

– De cerca, hasta unos 50 cm

– Intermedia: de 50 a 150 cm

– Lejos a partir de 150 cm.

Se estima que está enfocando a  infinito si mira a más de 6 m.

En la adaptación de las lentes progresivas interviene muchos factores:

El tipo de lente: Se fabrican millones de lentes progresivas en el mundo, pero no todas son iguales. Hay mucha diferencia entre una lente fabricada por una de las primeras marcas (Zeiss, Essilor, Hoya, Indo…)  y otras…  Además, dentro de cada marca, también son considerablemente diferentes, las lentes de la última generación y las de las primeras generaciones.

El tipo  progresión: No se han de adaptar las mismas lentes a un empleado de una tienda que trabaja habitualmente de pié –por ejemplo- que a una persona que trabaje sentada. Y si una persona trabaja con ordenador habitualmente, el tipo de lente progresiva ha de ser ocupacional.

Obviamente es importante  la graduación; el usuario ha de estar previamente graduado con exactitud  a todas las distancias.

La elección de la montura: No todas las monturas son idóneas para usar con lentes progresivas; aunque se podría decir que, actualmente se pueden montar lentes progresivas en casi todas las monturas.

La medición de los parámetros de montaje y el montaje propiamente dicho.

Las gafas progresivas se han de montar teniendo en cuenta las distancias entre los centros pupilares del usuario,  las alturas de los focos,  la inclinación de las lentes etc. que previamente se han de evaluar con precisión. Ahora hay instrumentos muy sofisticados para hacer estas mediciones, cuyo margen de error es mínimo.

También se ha de tener en cuenta las actividades del usuario,  su estatura,  su postura,  sus  movimientos oculares…

Actualmente hay la posibilidad de hacer las lentes progresivas, personalizadas,  “a medida” del usuario.

Si todo  esto se hace bien… la adaptación es fácil.

El equipo de profesionales de Federópticos Orense,  desde hace muchos años, está especializado en lentes progresivas (en gafas  y en lentes de contacto) tanto es así, que el % de adaptaciones que realiza con este tipo de lentes, supera al doble de la media nacional, y garantiza su adaptación.

Si cree que pueda tener presbicia o vista cansada, visite a su óptico optometrista, y si las necesita y se puede permitir unas buenas lentes progresivas, bien adaptadas…  no se conforme con menos. El confort en la visión puede incidir directamente en su calidad de vida.

Para cualquier pregunta llame  al Tfº  91 533 68 90 de España,  escriba  a info@federopticosorense.com  o mejor –si tiene la posibilidad- acérquese a la calle Orense, 7 de Madrid;   de paso verá gafas de las mejores marcas,  comprobará que puede disponer… no sólo de una profesionalidad al más alto nivel, sino también de mucha experiencia y todo a precios más que sensatos.