Auriculares para Estudiar

El mes de enero es el mes de los exámenes para los estudiantes universitarios. Durante semanas, los jóvenes llenan las bibliotecas o se encierran en sus habitaciones para preparar las materias de las que serán examinados y poder aprobar las asignaturas. Muchos de ellos utilizan música para concentrarse y estudiar mejor. Aunque tiene sus ventajas, también puede conllevar ciertos problemas. Hoy vamos a tratar de conjugar el binomio música y auriculares para estudiar y saber en qué medida puede afectar a la salud auditiva de los estudiantes.

Música y Auriculares para Estudiar 

Gracias a los dispositivos móviles y a las plataformas de descarga de música, es posible seleccionar las canciones que más nos gustan y escucharlas a través de los auriculares en cualquier momento y lugar. La mayoría de los usuarios de auriculares son jóvenes y adolescentes. Utilizan los auriculares para escuchar música mientras amenizan diferentes momentos (como por ejemplo en los desplazamientos en los transportes públicos), para aislarse del exterior o para estudiar.

De hecho, estos dos últimos objetivos pueden ser complementarios. Escuchar música a través de los auriculares permite a los estudiantes aislarse del exterior y crear un ambiente relajado propicio para comprender y aprender.

Para algunas personas, en muchos casos los padres, puede parecer difícil alcanzar la concentración mientras se escucha música. No obstante los estudios confirman que, escuchar música agradable hace que el cerebro segregue dopamina. Este neurotransmisor mejora la felicidad y contribuye a lograr una mejor concentración.

Por otra parte, la música ayuda a la persona a estar más relajada evitando el estrés que se deriva de la preparación de los exámenes, especialmente cuando la fecha se aproxima. La música, puede contribuir a mejorar la capacidad de memoria. Eso sí, siempre que sea música sin letra ya que, en ese caso, puede distraer más que ayudar.

Auriculares y Volumen

El verdadero peligro de los auriculares es el volumen. O, mejor dicho, el exceso de volumen. Los auriculares de botón, que son los que se introducen en el conducto auditivo, proyectan el sonido muy cerca del tímpano lo que incrementa la presión acústica. Las células ciliadas, que se encuentran en el oído interno, pueden verse afectadas por el exceso de decibelios. Si estas células sufren o mueren, la audición se ve afectada a medio o largo plazo (el efecto del volumen es acumulativo).

Los auriculares de diadema son los más recomendables. Especialmente los que disponen de cancelación de ruido que permiten reducir el sonido ambiente, favoreciendo que se pueda oír la música a un menor volumen.

También es importante mantener limpios los auriculares para evitar la entrada de bacterias al oído. Además, es recomendable no compartir los auriculares.

Por último, cabe señalar que, pasar horas oyendo música puede sobreestimular el nervio auditivo y provocar un trauma acústico. Para evitarlo, es conveniente dejar descansar los oídos cada cierto tiempo. Si, después de estudiar durante horas utilizando auriculares para escuchar música, los oídos se resienten (se percibe un pitido en el oído o una sensación auditiva extraña) es preciso dejar de utilizar los auriculares. Y, si la situación persiste, acudir a un centro de salud auditiva.

Los profesionales de Audiocentro-Federópticos Orense (C/ Orense, 7) pueden revisar tu audición de manera rápida y sencilla para conocer el estado de tu salud auditiva y prevenir cualquier problema. Acércate a vernos o pide cita. ¡Y buena suerte en los exámenes!